jueves, 25 de enero de 2024

Coronilla a San Miguel Arcangel

Un día San Miguel Arcángel apareció a la devota Sierva de Dios Antonia De Astónac. El arcángel le dijo a la religiosa que deseaba ser honrado mediante la recitación de nueve salutaciones. Estas nueve plegarias corresponden a los nueve coros de ángeles. La corona consiste de un Padrenuestro y tres Ave Marías en honor de cada coro angelical.

Promesas: A los que practican esta devoción en su honor, San Miguel promete grandes bendiciones: Enviar un ángel de cada coro angelical para acompañar a los devotos a la hora de la Santa Comunión. Además, a los que recitasen estas nueve salutaciones todos los días, les asegura que disfrutarán de su asistencia continua. Es decir, durante esta vida y también después de la muerte. Aun mas, serán acompañados de todos los ángeles y con todos sus seres queridos, parientes y familiares serán librados del Purgatorio.


En esta coronilla invocaremos a los nueve coros de ángeles. Después de cada invocación rezaremos 1 Padre Nuestro y 3 Avemarías. Ofreceremos esta coronilla por la Iglesia, para que sea defendida de todas las asechanzas del demonio, y por los que están más alejados de Dios.

En el Nombre del Padre...

Se comienza la Corona rezando, la siguiente invocación:

Dios mío, ven en mi auxilio.
Señor, date prisa en socorrerme.

Gloria al Padre, etc.

1. Todopoderoso y eterno Dios, por la intercesión de San Miguel Arcángel y del coro celestial de los Serafines, enciende en nuestros corazones la llama de la perfecta caridad. Amén.

1 Padre Nuestro y 3 Avemarías

2. Todopoderoso y eterno Dios, por la intercesión de San Miguel Arcángel y del coro celestial de los Querubines, dígnate darnos tu gracia para que cada día aborrezcamos más el pecado y corramos con mayor decisión por el camino de la santidad. Amén.

1 Padre Nuestro y 3 Avemarías.

3. Todopoderoso y eterno Dios, por la intercesión de San Miguel Arcángel y del coro celestial de los Tronos, derrama en nuestras almas el espíritu de la verdadera humildad. Amén.

1 Padre Nuestro y 3 Avemarías.

4. Todopoderoso y eterno Dios, por la intercesión de San Miguel Arcángel y del coro celestial de las Dominaciones, danos señorío sobre nuestros sentidos de modo que no nos dejemos dominar por las malas inclinaciones. Amén.

1 Padre Nuestro y 3 Avemarías.

5. Todopoderoso y eterno Dios, por la intercesión de San Miguel Arcángel y del coro celestial de los Principados, infunde en nuestro interior el espíritu de obediencia. Amén.

1 Padre Nuestro y 3 Avemarías.

6. Todopoderoso y eterno Dios, por la intercesión de San Miguel Arcángel y del coro celestial de las Potestades, dígnate proteger nuestras almas contra las asechanzas y tentaciones del demonio. Amén.

1 Padre Nuestro y 3 Avemarías.

7. Todopoderoso y eterno Dios, por la intercesión de San Miguel Arcángel y del coro celestial de las Virtudes, no nos dejes caer en la tentación, mas líbranos del mal. Amén.

1 Padre Nuestro y 3 Avemarías.

8. Todopoderoso y eterno Dios, por la intercesión de San Miguel Arcángel y del coro celestial de los Arcángeles, concédenos el don de la perseverancia en la fe y buenas obras de modo que podamos llegar a la gloria del cielo. Amén.

 1 Padre Nuestro y 3 Avemarías.

9. Todopoderoso y eterno Dios, por la intercesión de San Miguel Arcángel y del coro celestial de los Ángeles, dígnate darnos la gracia de que nos custodien durante esta vida mortal y luego nos conduzcan al Paraíso. Amén.

1 Padre Nuestro y 3 Avemarías.

Se reza un Padre Nuestro en honor de cada uno de los siguientes ángeles:

*En honor a San Miguel ...... 1 Padre Nuestro
*En honor a San Gabriel...... 1 Padre Nuestro
*En honor a San Rafael........ 1 Padre Nuestro
*En honor a nuestro ángel de la Guarda..... 1 Padre Nuestro

Glorioso San Miguel, caudillo y príncipe de los ejércitos celestiales, fiel custodio de las almas, vencedor de los espíritus rebeldes, familiar de la casa de Dios, admirable guía después de Jesucristo, de sobrehumana excelencia y virtud, dígnate librar de todo mal a cuantos confiadamente recurrimos a ti y haz que mediante tu incomparable protección adelantemos todos los días en el santo servicio de Dios.

V. Ruega por nosotros, glorioso San Miguel, Príncipe de la Iglesia de Jesucristo.
R. Para que seamos dignos de alcanzar sus promesas.

Oremos. Todopoderoso y Eterno Dios, que por un prodigio de tu bondad y misericordia a favor de la común salvación de los hombres, escogiste por Príncipe de tu Iglesia al gloriosísimo Arcángel San Miguel, te suplicamos nos hagas dignos de ser librados por su poderosa protección de todos nuestros enemigos de modo que en la hora de la muerte ninguno de ellos logre perturbarnos, y podamos ser por él mismo introducidos en la mansión celestial para contemplar eternamente tu augusta y divina Majestad. Por los méritos de Jesucristo nuestro Señor. Amén. 

Si queremos, al final de la Coronilla a San Miguel Arcángel, podemos agregar la siguiente oración:

ORACIÓN A MARÍA
REINA DE LOS ÁNGELES

¡Oh Augusta Reina de los Cielos
y Señora de los Ángeles!
Pues habéis recibido de Dios el poder y la misión de aplastar la cabeza de la serpiente infernal; dignaos escuchar benigna las súplicas que humildemente os dirigimos; enviad las santas legiones para que, bajo vuestras órdenes, combatan a los demonios, donde quiera repriman su audacia y los persigan hasta precipitarlos al abismo.

¿Quién como Dios?
Santos Ángeles y Arcángeles, defendednos y guardadnos. ¡Oh buena y tierna Madre! Vos seréis siempre nuestro amor y nuestra esperanza. ¡Oh divina Madre! Enviad los Santos Ángeles para defendernos y rechazar lejos al demonio, nuestro mortal enemigo. Amén.

Rosario al Espíritu Santo

Se inicia con la secuencia:

Secuencia al Espíritu Santo

Ven Espíritu Divino, manda tu luz desde el cielo. Padre amoroso del pobre, Don, en tus dones espléndido. Luz que penetra las almas, fuente del mayor consuelo. Ven, Dulce Huésped del alma, descanso de nuestro esfuerzo, tregua en el duro trabajo, brisa en las horas de fuego, gozo que enjuga las lágrimas y reconforta en los duelos. Entra hasta el fondo del alma, Divina Luz y enriquécenos. Mira el vacío del hombre si tú le faltas por dentro; mira el poder del pecado, si no envías tu aliento. Riega la tierra en sequía, sana el corazón enfermo. Lava las manchas, infunde calor de vida en el hielo, doma el espíritu indómito, guía al que tuerce el sendero. Reparte tus siete dones según la fe de tus siervos. Por tu bondad y tu gracia dale al esfuerzo su mérito; salva al que busca salvarse y danos tu gozo eterno. Amén. Aleluya.

(Con un rosario normal de 50 cuentas)

En las cuentas grandes:
El Padre lo ordene, el Hijo lo disponga, el Espíritu Santo aplaque los corazones que estén en contra nuestra.

(Al finalizar cada decena se dice el Gloria)

En las cuentas chicas:
Ven Espíritu Santo, a mover los corazones que nos puedan hacer el bien.

Se termina con la Consagración al Espíritu Santo:

Recibid ¡oh Espíritu Santo!, la consagración perfecta y absoluta de todo mi ser, que os hago en este día para que os dignéis ser en adelante, en cada uno de los instantes de mi vida, en cada una de mis acciones, mi director, mi luz, mi guía, mi fuerza, y todo el amor de mi corazón. Yo me abandono sin reservas a vuestras divinas operaciones, y quiero ser siempre dócil a vuestras santas inspiraciones.

¡Oh Santo Espíritu! Dignaos formarme con María y en María, según el modelo de vuestro amado Jesús. Gloria al Padre Creador. Gloria al Hijo Redentor. Gloria al Espíritu Santo Santificador. Amén.

Rosario del Sagrado Corazón de Jesús

Se compone de cinco decenas, en honor a las cinco Llagas de Nuestro Señor Jesucristo.

Al comenzar:

Ánima Christi

Alma de Cristo, santifícame.
Cuerpo de Cristo, sálvame.
Corazón de Cristo, vivifícame.
Sangre de Cristo, embriágame.
Agua del costado de Cristo, lávame.
Pasión de Cristo, confórtame.
¡Oh, buen Jesús! Óyeme.
Dentro de tus llagas, escóndeme.
No permitas que me aparte de Ti.
Del maligno enemigo, defiéndeme.
A la hora de mi muerte, llámame.
Y mándame ir a Ti.
Para que, con San José, La Virgen María,
tus Ángeles y tus Santos
Te alabe y te bendiga por los siglos de los siglos. Amén.

En las cuentas grandes (en lugar del Padre Nuestro):
Jesús, dulce y humilde de Corazón, haced el mío, semejante al Vuestro.

En las cuentas Pequeñas (en lugar del Avemaría):
Sagrado Corazón de Jesús: En Vos confío.

Al final de cada decena (Jaculatoria):
Inmaculado Corazón de María: Sé la Salvación del alma mía.

Oraciones Finales

Corazón de Jesús:
¡Misericordia!

Corazón agonizante:
Ten piedad de los moribundos.

Un Padre Nuestro y un Ave María
en memoria de una persona enferma.


Letanías Del Sagrado Corazón De Jesús

V: Señor, ten piedad de nosotros.
R: Señor, ten piedad de nosotros.

V: Cristo, ten piedad de nosotros.
R: Cristo, ten piedad de nosotros.

V: Señor, ten piedad de nosotros.
R: Señor, ten piedad de nosotros.

V: Cristo, óyenos.
R: Cristo, óyenos.

V: Cristo, escúchanos.
R: Cristo, escúchanos.

V: Dios, Padre celestial,
R: ten piedad de nosotros.

V: Dios Hijo, Redentor del mundo,
R: ten piedad de nosotros.

V: Dios Espíritu Santo,
R: ten piedad de nosotros.

V: Trinidad Santa, un solo Dios,
R: ten piedad de nosotros.

V: Corazón de Jesús, Hijo del Eterno Padre. R: Ten piedad de nosotros.
V: Corazón de Jesús, formado por el Espíritu Santo en el seno de la Virgen María, R/.
Corazón de Jesús, unido substancialmente al Verbo de Dios, R/.
Corazón de Jesús, de majestad infinita, R/.
Corazón de Jesús, templo santo de Dios, R/.
Corazón de Jesús, tabernáculo del Altísimo, R/.
Corazón de Jesús, casa de Dios y puerta del cielo, R/.
Corazón de Jesús, lleno de bondad y amor, R/.
Corazón de Jesús, hoguera ardiente de caridad, R/.
Corazón de Jesús, asilo de justicia y de amor, R/.
Corazón de Jesús, lleno de bondad y de amor, R/.
Corazón de Jesús, abismo de todas las virtudes, R/.
Corazón de Jesús, digno de toda alabanza, R/.
Corazón de Jesús, Rey y centro de todos los corazones, R/.
Corazón de Jesús, en quien están todos los tesoros de la sabiduría y la ciencia, R/.
Corazón de Jesús, en quien habita toda la plenitud de la divinidad, R/.
Corazón de Jesús, en quién el Padre halló sus complacencias, R/.
Corazón de Jesús, en cuya plenitud todos hemos recibido, R/.
Corazón de Jesús, deseo de los eternos collados, R/.
Corazón de Jesús, paciente y de mucha misericordia, R/.
Corazón de Jesús, rico para todos los que te invocan, R/.
Corazón de Jesús, fuente de vida y de santidad, R/.
Corazón de Jesús, propiciación por nuestros pecados, R/.
Corazón de Jesús, despedazado por nuestros delitos, R/.
Corazón de Jesús, hecho obediente hasta la muerte, R/.
Corazón de Jesús, traspasado por una lanza, R/.
Corazón de Jesús, vida y resurrección nuestra, R/.
Corazón de Jesús, paz y reconciliación nuestra, R/.
Corazón de Jesús, víctima de los pecadores, R/.
Corazón de Jesús, salvación de los que en Ti esperan, R/.
Corazón de Jesús, esperanza de los que en Ti mueren y esperan, R/.
Corazón de Jesús, delicia de todos los santos, R/.

V: Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo,
R: perdónanos, Señor.

V: Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo,
R: óyenos, Señor.

V: Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo,
R: ten piedad y misericordia de nosotros.

V: Jesús, manso y humilde de corazón,
R: haz nuestro corazón semejante al Tuyo.

V: Sagrado Corazón de Jesús,
R: en Vos confío.

V: Sagrado Corazón de María,
R: salvad el alma mía.

V: Jesús y María os quiero con toda mi alma,
R: salvad almas y salvad el alma mía.

Oración

Oh Dios todopoderoso y eterno, mira el Corazón de tu amantísimo Hijo, las alabanzas y satisfacciones que en nombre de los pecadores te ofrece y concede el perdón a éstos que piden misericordia en el nombre de tu mismo Hijo, Jesucristo, el cual vive y reina contigo por los siglos de los siglos. Amén.

Consagración al Triunfo del Inmaculado Corazón de María - Dia 3

ORACIONES INICIALES

La Señal de la Cruz

ACTO DE CONTRICION

Pésame, Dios mío, y me arrepiento de todo corazón de haberos ofendido.

Pésame por el Infierno que merecí y por el Cielo que perdí; pero mucho más me pesa, porque pecando ofendí a un Dios tan bueno y tan grande como Vos.

Antes querría haber muerto que haberos ofendido, y propongo firmemente no pecar más, y evitar todas las ocasiones próximas de pecado. Amén.

CORONILLA DE VIRTUDES

«Queridos míos: estas oraciones son para obtener las virtudes. Se empieza con el Credo, luego sigue la Consagración a Mi Corazón Inmaculado y después el Ángelus. Posteriormente se reza la virtud seguida por el Padre Nuestro, el Gloria al Padre y la oración al Espíritu Santo. Después se recita la siguiente virtud y así se contemplan las siete virtudes: Fe, Esperanza, Caridad, Humildad, Paciencia, Perseverancia y Obediencia.

EL CREDO

Creo en Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra. Creo en Jesucristo, su único Hijo, Nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa María Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos, subió a las cielos y está sentado a la derecha de Dios, Padre Todopoderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos. Creo en el Espíritu Santo, la Santa Iglesia Católica, la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna. Amén.

CONSAGRACIÓN A LA SANTÍSIMA VIRGEN

Oh Señora mía, Oh Madre mía! Yo me entrego del todo a Vos; y en prueba de mi filial afecto, os consagro en este día, mis ojos, mis oídos, mi lengua, mi corazón; en una palabra, todo mi ser. Ya que soy todo vuestro Oh Madre de bondad, guardadme y defendedme como hijo y posesión vuestra.Amén

EL ÁNGELUS

V. El ángel de Señor anunció a María.
R. Y Ella concibió por obra y gracia del Espíritu Santo.

Ave María……

V. He aquí la esclava del Señor.
R. Hágase en mí según tu palabra.

Ave María……

V. Y el Verbo se hizo carne.
R. Y habitó entre nosotros.

Ave María……

V. Ruega por nosotros Santa Madre de Dios.
R. Para que seamos dignos de alcanzar las promesas y gracias de Nuestro Señor Jesucristo. Amén

Oremos: «Infunde Señor tu gracia en nuestros corazones, para que habiendo conocido por la voz del ángel el misterio de la Encarnación de tu hijo, podamos llegar por los méritos de su Pasión y su Cruz a la Gloria de la Resurrección. Por el mismo Cristo Nuestro Señor. Amén

MEDITACION DEL DIA

TERCER DÍA

«Ángel mío, te pido que renueves tu consagración a mí de una manera muy especial. En el día de tu consagración, pido que todos mis hijos se unan a mí, que vengan todos juntos y se consagren a mi Inmaculado Corazón. Ustedes no perciben cuantas gracias hay encerradas en este Acto, anhelo llevarlos a todos en mis brazos maternales y presentarlos a Dios Padre en el Cielo. Yo te presento a mi Hijo, que es tu verdad, tu vida y el Camino hacia la vida eterna en el Cielo.
 
Vengo a la tierra tan frecuentemente porque el mundo está influenciado por decepciones y por maldad. Deseo guiarlos hacia el mensaje completo del Evangelio, de esta manera ustedes podrán moldear sus vidas y así ganar la corona del cielo. Te advierto, querido Ángel, el mundo sucumbirá ante las tinieblas de las grandes tribulaciones. Les ruego que todos se entrelacen con mi Inmaculado Corazón que pueda protegerlos y guiarlos a través de tanta oscuridad. Les aseguro que ustedes no saben que difícil es, queridos hijos, escapar a las trampas de maldad que Satanás les prepara. Sus seducciones se han hecho atractivas y tan sutiles que sólo mediante la unión de nuestros corazones ustedes podrán salvarse de ellas.
 
Cada día se hará más claro que el rebaño que está consagrado a mí Corazón y llevado en mis brazos en esta hora final, será la de aquellos que son fieles al mensaje del Evangelio, al Vicario de Cristo y que adoran la presencia de mi Hijo en la Eucaristía; estos serán envueltos en los pliegues de mi manto mediante la Consagración a mi Inmaculado Corazón. Es esta la forma como Yo deseo guiarlos a la glorificación de la Santísima Trinidad. Ustedes encontrarán el paso por la puerta de mi Corazón y por este medio esparcirán la luz del esplendor divino. Cuando la luz que ustedes contienen sea esparcida sobre la tierra y mi parte, como portadora de esta luz se haya ya cumplido, mi Jesús reclamará el Reinado de su Sagrado Corazón y restaurará su Reino. Con los esfuerzos más pequeños ustedes derramarán esta gloria y así permanecerá en sus manos el Triunfo y la proclamación de nuestros dos corazones entre la humanidad».

Octubre 17 de 1992
 
Guía: La preparación para la consagración le da al alma una base para recibir una gracia excepcional, porque para que Dios conceda una gracia al alma, ésta tiene que estar preparada para recibirla. La preparación es un acto de purificación del alma y este acto de preparación debe ser completado a un nivel comparable con la grandeza de la gracia que será otorgada por Dios.
 
Este acto de consagración es una comunión Espiritual con El, por medio del Corazón de María y nunca deber ser hecho a la ligera. Debemos hacer nuestra consagración con un profundo sentido de la realidad de la gracia que está contenida en este acto. La preparación que precede al acto debe ser tomada muy seriamente. El propósito de esta preparación es darle al alma una base para recibir esta gracia tan grande. Nuestra Señora dice que antes que Dios pueda conceder una gracia en toda su plenitud, el alma debe estar preparada para recibirla.

Dirección:
Lo primero que debemos buscar en nosotros es un ardiente deseo de perfección en el alma. Este es el medio por el cual se adquiere la santidad. Nuestra consagración al Inmaculado Corazón de María, nos facilita la perfección en el alma. Primero tenemos que progresar en virtud y aspirar al grado más alto de santidad por medio de nuestro propio deseo.
 
Los deseos santos son las alas benditas con las cuales uno escapa de los lazos mundanos. Por este medio nosotros estaremos aptos para volar hacia las alturas de perfección, donde encontraremos la paz que el mundo no puede darnos.
 
Meditación: ¡Oh Inmaculado Corazón de María!, ayúdame a abrir mi alma para recibir la gracia inmensa que Dios desea concederme. Que yo me prepare con un entero conocimiento de los dones preciosos que mi alma va a recibir; que me entregue con toda sinceridad, humildad y pureza para obtener lo que Dios se digne extender sobre mí, sin que yo lo merezca.
 
«La voluntad de Dios es que se hagan Santos»
(1ª Tesalonicenses 4:3)

ORACIONES FINALES

CORONILLA DE VIRTUDES

Te pido Madre que alcances para mí la Virtud de la: 

1.Virtud de Fe
2.Virtud de Esperanza
3.Virtud de Caridad
4.Virtud de Humildad
5.Virtud de Paciencia
6.Virtud de Perseverancia
7.Virtud de la Obediencia

Con cada una de las virtudes se deben recitar las siguientes oraciones:

1. Padre Nuestro…
2. Gloria al Padre…
3. Oración al Espíritu Santo

Oración al Espíritu Santo: 

Ven Espíritu Santo, ilumina mi corazón, para ver las cosas que son de Dios; Ven Espíritu Santo, dentro de mi mente, para conocer las cosas que son de Dios; Ven Espíritu Santo, dentro de mi alma, que yo le pertenezco solamente a Dios; Santifica todo lo que yo piense, diga y haga para que todo sea para la gloria de Dios. Amén
 
¡OH MARÍA!
 
«Oh María; transforma mi corazón como el tuyo; colócale alrededor una corona de pureza adornada con virtud; toma mi corazón querida Madre consagrado como tuyo propio; preséntaselo a Dios Padre como una ofrenda de mí para ti. Ayúdame, Oh María, en hacer tu corazón más conocido cada día».
 
ORACIÓN DE PENTECOSTÉS
 
Espíritu de Cristo: despiértame; Espíritu de Cristo: muéveme; Espíritu de Cristo: lléname; Espíritu de Cristo: séllame. Oh Padre Celestial, conságrame a tu Corazón y Voluntad; se en mí una fuente de virtudes, sella mi alma como la tuya para que tu reflejo en mí sea una luz que todos vean». Amén

Consagración al Triunfo del Inmaculado Corazón de María - Dia 2

ORACIONES INICIALES

La Señal de la Cruz

ACTO DE CONTRICION

Pésame, Dios mío, y me arrepiento de todo corazón de haberos ofendido.

Pésame por el Infierno que merecí y por el Cielo que perdí; pero mucho más me pesa, porque pecando ofendí a un Dios tan bueno y tan grande como Vos.

Antes querría haber muerto que haberos ofendido, y propongo firmemente no pecar más, y evitar todas las ocasiones próximas de pecado. Amén.

CORONILLA DE VIRTUDES

«Queridos míos: estas oraciones son para obtener las virtudes. Se empieza con el Credo, luego sigue la Consagración a Mi Corazón Inmaculado y después el Ángelus. Posteriormente se reza la virtud seguida por el Padre Nuestro, el Gloria al Padre y la oración al Espíritu Santo. Después se recita la siguiente virtud y así se contemplan las siete virtudes: Fe, Esperanza, Caridad, Humildad, Paciencia, Perseverancia y Obediencia.

EL CREDO

Creo en Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra. Creo en Jesucristo, su único Hijo, Nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa María Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos, subió a las cielos y está sentado a la derecha de Dios, Padre Todopoderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos. Creo en el Espíritu Santo, la Santa Iglesia Católica, la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna. Amén.

CONSAGRACIÓN A LA SANTÍSIMA VIRGEN

Oh Señora mía, Oh Madre mía! Yo me entrego del todo a Vos; y en prueba de mi filial afecto, os consagro en este día, mis ojos, mis oídos, mi lengua, mi corazón; en una palabra, todo mi ser. Ya que soy todo vuestro Oh Madre de bondad, guardadme y defendedme como hijo y posesión vuestra.Amén

EL ÁNGELUS

V. El ángel de Señor anunció a María.
R. Y Ella concibió por obra y gracia del Espíritu Santo.

Ave María……

V. He aquí la esclava del Señor.
R. Hágase en mí según tu palabra.

Ave María……

V. Y el Verbo se hizo carne.
R. Y habitó entre nosotros.

Ave María……

V. Ruega por nosotros Santa Madre de Dios.
R. Para que seamos dignos de alcanzar las promesas y gracias de Nuestro Señor Jesucristo. Amén

Oremos: «Infunde Señor tu gracia en nuestros corazones, para que habiendo conocido por la voz del ángel el misterio de la Encarnación de tu hijo, podamos llegar por los méritos de su Pasión y su Cruz a la Gloria de la Resurrección. Por el mismo Cristo Nuestro Señor. Amén

MEDITACION DEL DIA

SEGUNDO DÍA

«Mis queridos hijos. Vengo a ofrecerles mi más grande regalo: darles mi amor en un intercambio muy especial – Mi Corazón por el de ustedes. En este intercambio, ustedes harán el Acto de Consagración a mi Inmaculado Corazón participando así en mi Triunfo. Hijos míos, yo lo pido pero la decisión es solamente de ustedes».
 
Agosto 9 de 1992
 
Guía: Nuestra Señora nos recuerda cual es el propósito de la Consagración. La Consagración encierra la promesa del alma de ser poseída por Ella y por medio de Ella por Dios, por el Espíritu Santo. Como Ella permanece como la esposa del Espíritu Santo, todo le es dado por Dios y de este modo, nuestros corazones también están prometidos a Dios por medio de nuestra Consagración a Ella. Como el propósito entero de Nuestra Señora es llevar a todos los corazones a su Hijo, Ella en efecto, está recogiendo todas las almas para Él.
 
En el Acto de Consagración, por medio de la gracia divina, nuestro corazón es intercambiado por el corazón de Nuestra Señora y entonces nuestras almas son purificadas y sanadas por medio de una reconciliación enfocada hacia Dios. Cuando el alma llega a unirse con Nuestra Señora, el deseo de imitarla a Ella se convierte en el propósito de esta unión.
 
El corazón es elevado al nivel de pureza necesaria para que corresponda con la imitación de Nuestra Señora y así llegar a la atmósfera Espiritual necesaria para que pueda ocurrir el intercambio de corazones. En esta invitación, nuestro corazón es atraído por la fuerza del deseo para que pueda encontrarse al otro lado con Dios para el intercambio. El Acto de Consagración es una comunión Espiritual con Jesús a través del Corazón de Nuestra Señora.
 
Dirección: Nuestra Señora nos dice que nosotros no reconocemos el poder que se nos da por medio de la oración. Nosotros llevamos la llave para la paz del mundo en nuestros corazones. Por medio de la oración, la relación entre Dios y nosotros es aumentada; y mediante este tiempo que pasamos con El, de corazón a corazón, todas nuestras necesidades serán satisfechas.
 
Nosotros debemos dedicar un tiempo para hacer crecer esta relación. No es posible tener una relación de uno solo nada más. Debemos darle tiempo a El, para que El revele a nuestro corazón sus designios para nosotros. En la soledad de la oración, nuestra alma aprende todos los misterios del Cielo.
 
Meditación: ¡Oh Corazón Inmaculado de María!, ayúdame a rezar para que el fuego de mi corazón pueda llegar, por medio tuyo, al nivel necesario para el intercambio de mi corazón por el tuyo. Madre querida, yo ruego para poder darte el «SI» de la simplicidad, creada por la pureza de mi corazón con la intención de imitar a tu corazón. Santa María, asísteme en mi deseo para amar a Dios con toda mi alma, para hacer todo lo que esté en mi poder para agradarlo a El, que me ama tanto. Deseo unirme a Ti eternamente para que Tú puedas presentarme ante el trono de Tu Hijo en un estado de perfección y lleno de amor sagrado. 

«Y todo el que deja casa, hermanos, hermanas, padre, madre, hijos o propiedades, por amor de mi Nombre, recibirá cien veces lo que dejó y tendrá por herencia la vida eterna. (Mateo 19:29)

ORACIONES FINALES

CORONILLA DE VIRTUDES

Te pido Madre que alcances para mí la Virtud de la: 

1.Virtud de Fe
2.Virtud de Esperanza
3.Virtud de Caridad
4.Virtud de Humildad
5.Virtud de Paciencia
6.Virtud de Perseverancia
7.Virtud de la Obediencia

Con cada una de las virtudes se deben recitar las siguientes oraciones:

1. Padre Nuestro…
2. Gloria al Padre…
3. Oración al Espíritu Santo

Oración al Espíritu Santo: 

Ven Espíritu Santo, ilumina mi corazón, para ver las cosas que son de Dios; Ven Espíritu Santo, dentro de mi mente, para conocer las cosas que son de Dios; Ven Espíritu Santo, dentro de mi alma, que yo le pertenezco solamente a Dios; Santifica todo lo que yo piense, diga y haga para que todo sea para la gloria de Dios. Amén
 
¡OH MARÍA!
 
«Oh María; transforma mi corazón como el tuyo; colócale alrededor una corona de pureza adornada con virtud; toma mi corazón querida Madre consagrado como tuyo propio; preséntaselo a Dios Padre como una ofrenda de mí para ti. Ayúdame, Oh María, en hacer tu corazón más conocido cada día».
 
ORACIÓN DE PENTECOSTÉS
 
Espíritu de Cristo: despiértame; Espíritu de Cristo: muéveme; Espíritu de Cristo: lléname; Espíritu de Cristo: séllame. Oh Padre Celestial, conságrame a tu Corazón y Voluntad; se en mí una fuente de virtudes, sella mi alma como la tuya para que tu reflejo en mí sea una luz que todos vean». Amén

miércoles, 24 de enero de 2024

Consagración al Triunfo del Inmaculado Corazón de María - Dia 1

ORACIONES INICIALES

La Señal de la Cruz

ACTO DE CONTRICION

Pésame, Dios mío, y me arrepiento de todo corazón de haberos ofendido.

Pésame por el Infierno que merecí y por el Cielo que perdí; pero mucho más me pesa, porque pecando ofendí a un Dios tan bueno y tan grande como Vos.

Antes querría haber muerto que haberos ofendido, y propongo firmemente no pecar más, y evitar todas las ocasiones próximas de pecado. Amén.

CORONILLA DE VIRTUDES

«Queridos míos: estas oraciones son para obtener las virtudes. Se empieza con el Credo, luego sigue la Consagración a Mi Corazón Inmaculado y después el Ángelus. Posteriormente se reza la virtud seguida por el Padre Nuestro, el Gloria al Padre y la oración al Espíritu Santo. Después se recita la siguiente virtud y así se contemplan las siete virtudes: Fe, Esperanza, Caridad, Humildad, Paciencia, Perseverancia y Obediencia.

Octubre, 1 de 1.992

EL CREDO

Creo en Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra. Creo en Jesucristo, su único Hijo, Nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa María Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos, subió a las cielos y está sentado a la derecha de Dios, Padre Todopoderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos. Creo en el Espíritu Santo, la Santa Iglesia Católica, la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna. Amén.

CONSAGRACIÓN A LA SANTÍSIMA VIRGEN

Oh Señora mía, Oh Madre mía! Yo me entrego del todo a Vos; y en prueba de mi filial afecto, os consagro en este día, mis ojos, mis oídos, mi lengua, mi corazón; en una palabra, todo mi ser. Ya que soy todo vuestro Oh Madre de bondad, guardadme y defendedme como hijo y posesión vuestra.Amén

EL ÁNGELUS

V. El ángel de Señor anunció a María.
R. Y Ella concibió por obra y gracia del Espíritu Santo.

Ave María……

V. He aquí la esclava del Señor.
R. Hágase en mí según tu palabra.

Ave María……

V. Y el Verbo se hizo carne.
R. Y habitó entre nosotros.

Ave María……

V. Ruega por nosotros Santa Madre de Dios.
R. Para que seamos dignos de alcanzar las promesas y gracias de Nuestro Señor Jesucristo. Amén

Oremos: «Infunde Señor tu gracia en nuestros corazones, para que habiendo conocido por la voz del ángel el misterio de la Encarnación de tu hijo, podamos llegar por los méritos de su Pasión y su Cruz a la Gloria de la Resurrección. Por el mismo Cristo Nuestro Señor. Amén
 

MEDITACION DEL DIA

PRIMER DÍA 

«Queridos hijos: el acto de Consagración a mi Corazón Inmaculado, como yo les digo, es un acto de amor y no simplemente palabras. Me llena de regocijo saber que sus corazones lo entienden así. Les digo que sus corazones son la ventana del alma, el acto de consagración abre esa ventana; sus almas son como un prisma diseñado por Dios, como su propio reflejo. Si en este prisma hay impurezas, no podrá reflejar la gloria para la cual fue diseñado; para llevar claridad al alma ustedes deben rezar, para traer claridad al alma tienen que rezar; solamente por medio de la oración pueden ser disueltas todas las impurezas.
 
Queridos míos: miren dentro de mi Corazón pues al asomarse a él recibirán a la Trinidad; Yo solo puedo reflejarles la presencia de Dios. Escuchen, hijos míos: les aseguro, abran sus corazones para recibir la luz de Dios y permitan que solo Él se refleje en ustedes»
 
Julio 7 de 1992
 
Guía: Nuestra Señora nos trae un llamado a su misión: La misión para su Triunfo. Esta misión comienza con nuestra Consagración a su Inmaculado Corazón; de esta manera nosotros respondemos al llamado de santidad y a la búsqueda de paz dentro de nosotros mismos y en el mundo entero.
 
Debemos comenzar por darnos cuenta que este es un llamado a una conversión personal, que envuelve nuestra propia alma y corazón, que permite a Dios obrar en nosotros y por medio de nosotros. El acto de Consagración es exactamente lo que Nuestra Señora ha dicho: un acto. El acto de Consagración unirá nuestros corazones con el de Ella hacia su Hijo a través de una gracia especialmente creada.

Dirección: La oración es la que crea nuestra relación con Dios. Mediante este acto de comunión, Dios viene a nuestros corazones y nosotros vamos hacia Él. Por medio de la oración, todas las impurezas que hay dentro de nosotros, pueden ser llevadas ante El y transformadas por su Gracia. Tener serenidad en el alma es estar lleno de la presencia de Dios. Primero debemos unirnos como uno a Dios; entonces, por medio de nuestra unión con El, El podrá obrar maravillas por medio nuestro.
 
Meditación: ¡Oh Corazón Inmaculado de María!, ayúdame para que la ventana de mi alma permanezca siempre abierta y transparente para que todas las impurezas puedan ser borradas y que Dios sea magnificado y glorificado, a través de mi propia conversión, consagración y testimonio. Madre querida, que yo pueda poner en acción las palabras que te prometo. Abre mi corazón para que yo me convierta en la señal del Triunfo en todo el mundo.

ORACIONES FINALES

CORONILLA DE VIRTUDES

Te pido Madre que alcances para mí la Virtud de la: 

1.Virtud de Fe
2.Virtud de Esperanza
3.Virtud de Caridad
4.Virtud de Humildad
5.Virtud de Paciencia
6.Virtud de Perseverancia
7.Virtud de la Obediencia

Con cada una de las virtudes se deben recitar las siguientes oraciones:

1. Padre Nuestro…
2. Gloria al Padre…
3. Oración al Espíritu Santo

Oración al Espíritu Santo: 

Ven Espíritu Santo, ilumina mi corazón, para ver las cosas que son de Dios; Ven Espíritu Santo, dentro de mi mente, para conocer las cosas que son de Dios; Ven Espíritu Santo, dentro de mi alma, que yo le pertenezco solamente a Dios; Santifica todo lo que yo piense, diga y haga para que todo sea para la gloria de Dios. Amén
 
Diciembre 23 de 1991
 
¡OH MARÍA!
 
«Oh María; transforma mi corazón como el tuyo; colócale alrededor una corona de pureza adornada con virtud; toma mi corazón querida Madre consagrado como tuyo propio; preséntaselo a Dios Padre como una ofrenda de mí para ti. Ayúdame, Oh María, en hacer tu corazón más conocido cada día».
 
Marzo 19 de 1993
 
ORACIÓN DE PENTECOSTÉS
 
Mientras se reza esta oración dada por Nuestra Señora que nuestros corazones estén abiertos para reconocer y aceptar los obsequios del Espíritu Santo, y así avancemos confiadamente en esta batalla por el triunfo del Inmaculado Corazón. Estamos llamados para transformarnos en el reflejo de Cristo, un reflejo del rostro de Dios que será una atracción para todos, para que su gloria sea magnificada a través de nuestras vidas.
 
«Mis queridos hijos: hoy ustedes les traen tanta alegría a mi Jesús. Yo les doy a ustedes una gran bendición de Dios. El desea crear en sus hijos unidad y gloria a Su Nombre.»
 
Junio 6 de 1992
 
Espíritu de Cristo: despiértame; Espíritu de Cristo: muéveme; Espíritu de Cristo: lléname; Espíritu de Cristo: séllame. Oh Padre Celestial, conságrame a tu Corazón y Voluntad; se en mí una fuente de virtudes, sella mi alma como la tuya para que tu reflejo en mí sea una luz que todos vean». Amén
 
Junio 7 de 1992

Devocion de los 33 Credos

La devoción de los 33 Credos se utiliza para pedir misericordia,  aplacar actos violentos, las guerras, los fenómenos naturales y para vencer las asechanzas del demonio.

Se reza de la siguiente forma:

1.- Se hace la petición de lo que queremos alcanzar.

2.- La Señal de la Santa Cruz.

3.- Un Padre Nuestro.

4.- Se rezan 11 Credos.

5.- Se dice lo siguiente:

Bendito seas Señor, Dios de nuestros padres, loado, exaltado eternamente.

Bendito el santo nombre de tu gloria, loado, exaltado eternamente.

Bendito seas en el Templo de tu santa gloria, cantado, enaltecido eternamente.

Bendito seas en el trono de tu reino, cantado, exaltado eternamente.

Bendito Tú, que sondas los abismos, que te sientas sobre querubines, loado, exaltado eternamente.

Bendito seas en el firmamento del Cielo, cantado, glorificado eternamente.

Obras todas del Señor, bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Ángeles del Señor, bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Cielos, bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Aguas todas que estáis sobre los Cielos, bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Potencias todas del Señor, bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Sol y luna bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Astros del Cielo, bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Lluvia toda y rocío, bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

6.- Un Padre Nuestro.

7.- Se rezan otros 11 Credos.

8.- Se dice lo siguiente:

Vientos todos bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Fuego y calor, bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Frío y ardor, bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Rocíos y escarchas bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Hielos y frío, bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Heladas y nieves, bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Noches y días, bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Luz y tinieblas, bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Rayos y nubes bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Bendiga la Tierra al Señor, le cante, le exalte eternamente.

Montes y colinas bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Todo lo que germina en la Tierra, bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Fuentes, bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

9.- Un Padre Nuestro.

10.- Se rezan los 11 Credos que faltan.

11.- Se dice lo siguiente:

Mares y ríos, bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Cetáceos y todo lo que se mueve en las aguas, bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Pájaros todos del Cielo, bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Fieras todas y bestias, bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Hijos de los hombres, bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Israel, bendice al señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Sacerdotes del Señor, bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Siervos del Señor, bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Espíritus y almas de los justos, bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Santos y humildes de corazón, bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Ananías, Azarías, Misael, bendecid al Señor, cantadle, exaltadle eternamente.

Porque Él nos ha arrancado del Infierno, nos ha salvado de la mano de la muerte, nos ha sacado del horno de llama abrasadora, nos ha rescatado del medio de la llama.

Dad gracias al Señor porque es bueno, porque es eterna su  misericordia.

Todos los que veneráis al Señor, bendecid al Dios de los dioses, cantadle, dadle gracias, porque es eterna su misericordia.

12.- Un Padre Nuestro.

13.- Se finaliza con 3 Gloria.