ORACIONES INICIALES
La Señal de la Cruz
ACTO DE CONTRICION
Pésame, Dios mío, y me arrepiento de todo corazón de haberos ofendido.
Pésame por el Infierno que merecí y por el Cielo que perdí; pero mucho más me pesa, porque pecando ofendí a un Dios tan bueno y tan grande como Vos.
Antes querría haber muerto que haberos ofendido, y propongo firmemente no pecar más, y evitar todas las ocasiones próximas de pecado. Amén.
CORONILLA DE VIRTUDES
«Queridos
míos: estas oraciones son para obtener las virtudes. Se empieza con el
Credo, luego sigue la Consagración a Mi Corazón Inmaculado y después el
Ángelus. Posteriormente se reza la virtud seguida por el Padre Nuestro,
el Gloria al Padre y la oración al Espíritu Santo. Después se recita la
siguiente virtud y así se contemplan las siete virtudes: Fe, Esperanza,
Caridad, Humildad, Paciencia, Perseverancia y Obediencia.
EL CREDO
Creo
en Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra. Creo en
Jesucristo, su único Hijo, Nuestro Señor, que fue concebido por obra y
gracia del Espíritu Santo, nació de Santa María Virgen, padeció bajo el
poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, descendió a
los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos, subió a las
cielos y está sentado a la derecha de Dios, Padre Todopoderoso. Desde
allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos. Creo en el Espíritu Santo,
la Santa Iglesia Católica, la comunión de los santos, el perdón de los
pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna. Amén.
CONSAGRACIÓN A LA SANTÍSIMA VIRGEN
Oh
Señora mía, Oh Madre mía! Yo me entrego del todo a Vos; y en prueba de
mi filial afecto, os consagro en este día, mis ojos, mis oídos, mi
lengua, mi corazón; en una palabra, todo mi ser. Ya que soy todo vuestro
Oh Madre de bondad, guardadme y defendedme como hijo y posesión
vuestra.Amén
EL ÁNGELUS
V. El ángel de Señor anunció a María.
R. Y Ella concibió por obra y gracia del Espíritu Santo.
Ave María……
V. He aquí la esclava del Señor.
R. Hágase en mí según tu palabra.
Ave María……
V. Y el Verbo se hizo carne.
R. Y habitó entre nosotros.
Ave María……
V. Ruega por nosotros Santa Madre de Dios.
R. Para que seamos dignos de alcanzar las promesas y gracias de Nuestro Señor Jesucristo. Amén
Oremos:
«Infunde Señor tu gracia en nuestros corazones, para que habiendo
conocido por la voz del ángel el misterio de la Encarnación de tu hijo,
podamos llegar por los méritos de su Pasión y su Cruz a la Gloria de la
Resurrección. Por el mismo Cristo Nuestro Señor. Amén
«Ángel mío, te pido que renueves tu consagración a mí de una manera muy especial. En el día de tu consagración, pido que todos mis hijos se unan a mí, que vengan todos juntos y se consagren a mi Inmaculado Corazón. Ustedes no perciben cuantas gracias hay encerradas en este Acto, anhelo llevarlos a todos en mis brazos maternales y presentarlos a Dios Padre en el Cielo. Yo te presento a mi Hijo, que es tu verdad, tu vida y el Camino hacia la vida eterna en el Cielo.
MEDITACION DEL DIA
TERCER DÍA
Vengo a la tierra tan frecuentemente porque el mundo está influenciado por decepciones y por maldad. Deseo guiarlos hacia el mensaje completo del Evangelio, de esta manera ustedes podrán moldear sus vidas y así ganar la corona del cielo. Te advierto, querido Ángel, el mundo sucumbirá ante las tinieblas de las grandes tribulaciones. Les ruego que todos se entrelacen con mi Inmaculado Corazón que pueda protegerlos y guiarlos a través de tanta oscuridad. Les aseguro que ustedes no saben que difícil es, queridos hijos, escapar a las trampas de maldad que Satanás les prepara. Sus seducciones se han hecho atractivas y tan sutiles que sólo mediante la unión de nuestros corazones ustedes podrán salvarse de ellas.
Cada día se hará más claro que el rebaño que está consagrado a mí Corazón y llevado en mis brazos en esta hora final, será la de aquellos que son fieles al mensaje del Evangelio, al Vicario de Cristo y que adoran la presencia de mi Hijo en la Eucaristía; estos serán envueltos en los pliegues de mi manto mediante la Consagración a mi Inmaculado Corazón. Es esta la forma como Yo deseo guiarlos a la glorificación de la Santísima Trinidad. Ustedes encontrarán el paso por la puerta de mi Corazón y por este medio esparcirán la luz del esplendor divino. Cuando la luz que ustedes contienen sea esparcida sobre la tierra y mi parte, como portadora de esta luz se haya ya cumplido, mi Jesús reclamará el Reinado de su Sagrado Corazón y restaurará su Reino. Con los esfuerzos más pequeños ustedes derramarán esta gloria y así permanecerá en sus manos el Triunfo y la proclamación de nuestros dos corazones entre la humanidad».
Octubre 17 de 1992
Este acto de consagración es una comunión Espiritual con El, por medio del Corazón de María y nunca deber ser hecho a la ligera. Debemos hacer nuestra consagración con un profundo sentido de la realidad de la gracia que está contenida en este acto. La preparación que precede al acto debe ser tomada muy seriamente. El propósito de esta preparación es darle al alma una base para recibir esta gracia tan grande. Nuestra Señora dice que antes que Dios pueda conceder una gracia en toda su plenitud, el alma debe estar preparada para recibirla.
Dirección: Lo primero que debemos buscar en nosotros es un ardiente deseo de perfección en el alma. Este es el medio por el cual se adquiere la santidad. Nuestra consagración al Inmaculado Corazón de María, nos facilita la perfección en el alma. Primero tenemos que progresar en virtud y aspirar al grado más alto de santidad por medio de nuestro propio deseo.
Los deseos santos son las alas benditas con las cuales uno escapa de los lazos mundanos. Por este medio nosotros estaremos aptos para volar hacia las alturas de perfección, donde encontraremos la paz que el mundo no puede darnos.
Meditación: ¡Oh Inmaculado Corazón de María!, ayúdame a abrir mi alma para recibir la gracia inmensa que Dios desea concederme. Que yo me prepare con un entero conocimiento de los dones preciosos que mi alma va a recibir; que me entregue con toda sinceridad, humildad y pureza para obtener lo que Dios se digne extender sobre mí, sin que yo lo merezca.
«La voluntad de Dios es que se hagan Santos»
(1ª Tesalonicenses 4:3)
(1ª Tesalonicenses 4:3)
ORACIONES FINALES
CORONILLA DE VIRTUDES
Te pido Madre que alcances para mí la Virtud de la:
1.Virtud de Fe
2.Virtud de Esperanza
3.Virtud de Caridad
4.Virtud de Humildad
5.Virtud de Paciencia
6.Virtud de Perseverancia
7.Virtud de la Obediencia
Con cada una de las virtudes se deben recitar las siguientes oraciones:
1. Padre Nuestro…
2. Gloria al Padre…
3. Oración al Espíritu Santo
Oración al Espíritu Santo:
Ven
Espíritu Santo, ilumina mi corazón, para ver las cosas que son de Dios;
Ven Espíritu Santo, dentro de mi mente, para conocer las cosas que son
de Dios; Ven Espíritu Santo, dentro de mi alma, que yo le pertenezco
solamente a Dios; Santifica todo lo que yo piense, diga y haga para que
todo sea para la gloria de Dios. Amén
¡OH MARÍA!
«Oh
María; transforma mi corazón como el tuyo; colócale alrededor una
corona de pureza adornada con virtud; toma mi corazón querida Madre
consagrado como tuyo propio; preséntaselo a Dios Padre como una ofrenda
de mí para ti. Ayúdame, Oh María, en hacer tu corazón más conocido cada
día».
ORACIÓN DE PENTECOSTÉS
Espíritu
de Cristo: despiértame; Espíritu de Cristo: muéveme; Espíritu de
Cristo: lléname; Espíritu de Cristo: séllame. Oh Padre Celestial,
conságrame a tu Corazón y Voluntad; se en mí una fuente de virtudes,
sella mi alma como la tuya para que tu reflejo en mí sea una luz que
todos vean». Amén
No hay comentarios:
Publicar un comentario